Entendimiento de la vigencia de la dimensión axiológica del eterno Comandante Fidel desde la Universidad Médica

EDITORIAL

 

Entendimiento de la vigencia de la dimensión axiológica del eterno Comandante Fidel desde la Universidad Médica

 

Understanding of the Validity of the Axiological Dimension of the Eternal Commander Fidel from the Medical University

 

 

Deysi O. Lorenzo Felipe 1, Juan Carlos Vinardell Lorenzo 2, Teresita Guillen Godales 3

1. Máster en Epidemiología y en Ciencias Sociales y Axiología. Especialista de Primer y Segundo Grado en Organización y Administración de Salud Pública. Profesora Auxiliar. Facultad de Ciencias Médicas Mariana Grajales Coello. Universidad de Ciencias Médicas de Holguín. Holguín. Cuba. 
2. Especialista de Primer Grado en Higiene y Epidemiología. Policlínico Máximo Gómez Báez. Instructor. Facultad de Ciencias Médicas Mariana Grajales Coello. Universidad de Ciencias Médicas de Holguín. Holguín. Cuba. 
3. Especialista de Primer Grado en Cardiología. Especialista de Primer y Segundo Grado en Organización y Administración de Salud Pública. Asistente. Facultad de Ciencias Médicas Mariana Grajales Coello. Universidad de Ciencias Médicas de Holguín. Holguín. Cuba. 

 

 


Dentro de la competencia del entendimiento humano la naturaleza de las cosas como son en sí mismas, sus relaciones y su manera de operar, lo que el hombre mismo debe hacer, como un agente racional y voluntario, para alcanzar cualquier finalidad y especialmente su felicidad y las maneras y medios a través de los cuales el conocimiento de uno y otro aspecto se adquiere y se comunica, precisan en la ciencia para cada persona: el ser, el decir y el deber ser, como los grandes objetos de nuestro entendimiento 1.

Las dimensiones como ser humano de Fidel Castro Ruz, se articulan en su desarrollo integral, poseedor de un estilo educativo, por la formación exhaustiva y sistémica en su instrucción de los saberes específicos de las ciencias, que le hicieron portador en su crecimiento, de todas sus características, condiciones y potencialidades.

Se destacan en Fidel sus dimensiones cognitivas, espirituales, éticas, estéticas, comunicativas-afectivas y la socio-política, manifestadas en sus propias decisiones y valores, que subyacen por su vigencia en todos los contextos recorridos, donde se expresa una libertad regida por principios, que se sustenta y justifica con significados y fines que orientaron su vida y emanaron de su interacción socio-cultural, dada su habilidad para desentrañar, comprender e interpretar y construir desde las comprensiones sobre la realidad, las interacciones con el entorno y sus transformaciones. Cada proceso llevado a la praxis siempre cultivado con una ética que recorre la maduración de su conciencia, su juicio y su acción moral, donde las acciones poseen estricta coherencia con su pensamiento.

Sus motivaciones y el ejercicio de su voluntad y autonomía, trasciende su existencia para abrirse a los valores universales, con convicciones que le dan un sentido global y profundo a la existencia de su vida. En su relación se establece y surca una especial comunicación educativa, que emerge y se despliega a plenitud.

En cada minuto de su irrepetible existencia compartimos como miembros del planeta, el privilegio de aproximarnos a su sensible espiritualidad como traducción de su fidelidad en favorecer la construcción de cada ser social y ser copartícipe de cada contexto; su especial sensibilidad, su apreciación de la belleza y la expresión de su mundo interior de forma inteligible y comunicable, apela a la sensación y sus efectos en un nivel diferente en los discursos conceptuales con producción cultural, local y universal.

Poseedor de relevante capacidad como ser humano para vivir “entre” y “con” otros, en función de transformar cada entorno socio cultural en el que se sumerge, lo convierte en un sujeto político, con una conciencia histórica consolidada como ciudadano. Estimables sus conocimientos de las direcciones de los momentos históricos que hicieron parte de cada formación social y política y de cada entorno, custodiados de inseparables valores cívicos, claves para participar y deliberar de los interrogantes de la política, incluido el sentido de lo público, la solidaridad, la justicia, y el reconocimiento de la diferencia.

Prevalecen sus ideas de justicia, la necesidad de garantizar libertades individuales y colectivas, sentido de preocupación por fomentar la igualdad social. Imperecedera su defensa e instrumentación fehaciente de su proyecto político, que integra la participación, la concertación, alcanzar convivencia, desde un sentido de pertenencia y un ordenamiento social; para el logro del compromiso desde la construcción de una responsabilidad social, de la sociedad más justa.

Se remarca dentro de sus multitudinarias virtudes, su atención personalizada en alcanzar los propósitos en la esfera de la salud, intencionados en mejorar y optimizar el estado de salud de la población cubana y de cada ciudadano del mundo; con especial interés desde los inicios del proceso revolucionario en que los médicos futuros, nacieran dentro de la atmósfera y ambiente nuevo que trajo la Revolución, precisando lo imprescindible, disponer de un médico nuevo, con una formación integral para enfrentar las necesidades de salud de la población, educado científica y pedagógicamente mediante el estudio-trabajo en los escenarios reales donde transcurre el proceso salud-enfermedad. Y al hacer extensible la universalización de la educación médica en Cuba y para el mundo, se determinaría el ascenso de la calidad de los servicios de salud; antecedente que revela la comprensión temprana de vincular la formación de médicos con el desarrollo de los servicios de salud, quedando plasmada la importancia social de la formación de médicos 2.

La imperecedera y paradigmática educación liberadora y participativa, del Comandante Fidel, constituye una especial contribución para consolidar nuestra conciencia crítica en un ambiente donde educandos y maestros, integremos una comunidad médica motivadora y transformadora, en función de discernir la conducta, escoger responsablemente nuestras opciones fundamentales, desarrollar en coherencia con ellas nuestros hábitos, competencias y habilidades y así templar el alma como asegurara Don José de la Luz y Caballero.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Locke J. Ensayo sobre el entendimiento humano. Madrid: Nacional; 1980

2. Vela Valdés J. Formación de médicos en el mundo. ¿Qué distingue a Cuba? Rev Retos. 2017[citado 21 jul 2017]; 11(1).Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2306-91552017000100008

 

 

Recibido: 21 de julio de 2017
Aprobado: 21 de julio de 2017

 

 

MSc. Deysi O. Lorenzo Felipe. Facultad de Ciencias Médicas Mariana Grajales Coello. Universidad de Ciencias Médica de Holguín. Holguín. Cuba.
Correo electrónico: dlorenzof@infomed.sld.cu



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